ASSE indaga sobre la compra mensual en Centro Ceremos

La Administración de los Servicios de Salud del Estado (ASSE) inició ayer una investigación administrativa en el Centro de Rehabilitación Médico Ocupacional y Sicosocial (Ceremos) tras presentar dudas sobre una serie de compras directas de alimentos por cientos de miles de pesos.

Estas son solo “para el mes de marzo” y ya fueron adjudicadas, según confirmó a El País Eduardo Katz, director de Salud Mental del prestador.

En la página web de compras estatales surgen una serie de compras directas en Ceremos. Se trata de una repartición de ASSE que comprende a las excolonias Etchepare y Santín Carlos Rossi, ubicada en el kilómetro 79 de ruta 11, en el departamento de San José. En esta área se alimentan por día unas 650 personas: aproximadamente 500 usuarios y unos 150 funcionarios, de los poco más de 1.000 que trabajan allí.
Algunas compras directas, ya adjudicadas para el mes de marzo, son: 1.720 kilos de bananas, a $ 77.400; 1.400 kilos de arroz parboiled, por $ 55.271; 1.100 kilos de puré de papa instantáneo, por $ 180.499; 150 kilos de grasa, por $ 20.399; 45 frascos de 180 mililitros de edulcorante, por $ 7.425; 30 kilos de mejorador de harina, a $ 6.633; 29 kilos de coco rallado, por $ 7.854; 11 kilos de gelatina dietética, por $ 21.740; 10 litros de esencia de vainilla, por $ 1.183; cinco kilos de canela, por $ 2.568; y cuatro kilos de condifran, a $ 1.691.
Desde El País se consultó a varias autoridades de ASSE sobre esta serie de compras que aparecen en el portal público de compras que realiza el Estado, que están distinguidas por cada área y a lo largo del tiempo.

Luego de una serie de averiguaciones a la interna del organismo, Katz confirmó a El País que ayer se resolvió iniciar la investigación administrativa. Ceremos está bajo el paraguas del área de Salud Mental. El jerarca puntualizó que no gestiona directamente el centro, sino que este cuenta con un equipo de administración propio.
“Detecté que había una diferencia entre lo que se pide habitualmente y se pidió ahora. Sinceramente, no me quedaron muy claras las explicaciones dadas, entonces lo que hice fue abrir una investigación administrativa”, señaló Katz a El País sobre el paso que activó por estas horas.
Katz se desempeñó como director de Ceremos entre mayo y noviembre del año pasado. Por conocer de primera mano el movimiento en esa área, se mostró “sorprendido” por las cifras y le pareció “un poco excesivo” lo que arroja la web de compras estatales.

La investigación se va a realizar sobre las compras adjudicadas en marzo, que fueron las que le llamaron la atención, pero el jerarca señaló que se va a hacer un comparativo con el flujo de meses previos en esa área “para ver en dónde estuvo la variación”.
En la web de compras estatales aparecen adjudicaciones del mes próximo y también de abril. Es el caso de la compra de 34 docenas de atados de remolacha para los dos meses, por $ 85.000; así como nueve docenas de atados de puerros, a $ 16.020. Esto se suma a diferentes cantidades de perejil, repollo blanco y colorado, que suman en total $ 132.944.
Además de las compras “para el mes de marzo”, hay otras adjudicadas a mediados de febrero que no especifican el período de cobertura para Ceremos.

Ejemplo de estas compras son 360 kilos de atún, por $ 134.391, así como 270 kilos de pescado de río congelado por $ 83.008.
Se adjudicaron también compras directas de flanes, gelatinas, supremas de pollo, duraznos en almíbar, levadura, condimentos, chauchas y papas congeladas para el centro de San José. Estos gastos también fueron por decenas de miles de pesos